La moneda que pasó de ser un chiste a figurar entre los activos digitales más cotizados en la actualidad.
Todo comenzó en diciembre del 2013, un programador estadounidense y un australiano que estaba al frente del departamento de marketing de Adobe Systems unieron fuerzas para crear una criptomoneda.Ambos tenían la intención de burlarse de la fiebre del crypto, así que utilizaron como imagen de su moneda al famoso perro Shiba Inu de los memes. Al principio fue motivo de burlas, hasta que alcanzó cifras multimillonarias.
El funcionamiento del Dogecoin es parecido al de algunas criptomonedas, está basado en el Litecoin y se puede minar con un programa en tu computadora. Este activo usa un programa un Scrypt (programa criptográfico) y este deja que sea posible minar más rápido que incluso el Bitcoin. De hecho, las transacciones con esta moneda son más rápidas.
Su creciente popularidad viene de la mención que le han hecho algunas personas del medio, como Elon Musk, claro. Desde que cambió la biografía de su cuenta de Twitter por la palabra «Doge», las acciones de este activo se dispararon (tal y como ocurrió con anterioridad con el Bitcoin), además de compartir memes al respecto con bastante regularidad. Hasta Gene Simmons de la banda Kiss, ha hecho menciones al respecto de este activo.
Sin embargo, esta criptodivisa tuvo una gran caída el 24 de diciembre de 2013, cuando un cracker logró tener acceso con el sistema de ficheros de la cartera, enviando todas las monedas a una dirección estática. A pesar de este quiebre, el Dogecoin logró levantarse y volver a su lugar poco a poco.
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